En los últimos años hemos asistido, en distintas Comunidades Autónomas, a un continuo proceso de privatización de distintos ámbitos de la Sanidad pública. Siempre con la excusa de la "eficiencia", la gestión de hospitales y servicios fundamentales como la donación de sangre, que funcionaban perfectamente, han ido abriendo sus puertas a la empresa privada, un proceso nada inocente que, a pesar de la reciente suspensión dictada por la Justicia en la Comunidad de Madrid, dista mucho de estar cerrado.
El presente libro no sólo pone nombres y apellidos a los grandes beneficiados de este proceso, sino que también revela cuánto han ganado hasta la fecha, y cuánto pueden llegar a ganar en el futuro.